lunes, 25 de enero de 2010

Poema de Fernando Pessoa (Lisboa 1888-1935)


LLUVIA OBLICUA


III


La Gran Esfinge de Egipto papel adentro sueña...
Escribo -y la Esfinge aparece a través de mi mano transparente
y al borde del papel se yerguen las pirámides...

Escribo -y me turbo al ver que el punto de mi pluma
es perfil del Rey Keops...
De pronto me detengo.
Todo ha oscurecido... Caigo en un abismo hecho de tiempo...

Soterrado por las pirámides, estoy escribiendo versos a la clara luz de esta lámpara
y todo Egipto me aplasta desde lo alto a través de los trazos de la pluma...

Oigo a la Esfinge riendo por dentro
el son de mi pluma al recorrer el papel...
Una mano enorme atraviesa el que yo no pueda verla,
lo barre todo el borde del techo que tengo a mis espaldas
y sobre el papel donde escribo, entre el papel y la pluma que escribe,
yace el cadáver del Rey Keops mirándome con ojos muy abiertos,
y entre el cruzar de nuestras miradas corre el Nilo,
y una alegría de barcos embanderados errando va
en diagonal difusa
entre mí y lo que pienso...

¡Funerales del Rey Keops en oro viejo y Mí!

6 comentarios:

  1. Estimado poeta Olivas:

    Este poema de Pessoa nos demuestra que un poeta sin imaginación está limitado. Pessoa destila imaginación, ésto, más su gran calidad de poeta hace de este texto una pieza más parecida a una máquina del tiempo que a un poema. Es una virtud lograr esto a través de la poesía.

    Un abrazo fraterno en Amistad y Poesía verdaderas,

    Frank Ruffino.

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  2. Pessoa y todos sus heterónimos representan uno de los puntos más altos de la poesía.

    Bine señala Frank la importancia de la imaginación, que en este texto permite recrear un cruce espacio-temporal entre quien escribe y el rey Keops.

    Saludos

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  3. Frank y Asterión: Claro, sin duda un gran poema y un gran poeta.

    Gracias por pasar.

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  4. ...Mahavira...un día despertaremos sin la verguenza del pensamiento,sin estos ojos de otros y más nuestros,entonces nos sentaremos en una esquina a beber lo más barato de lo caro, reflexionar sobre el humo, mirar lo que queda en las mujeres sin perder el cielo por ello...

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  5. Oh, Pessoa, el gran Pessoa que fascina...

    Un abrazo de 2010,

    Ophir

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  6. Alabanzas y Ophir: Pessoa, el fingidor que a veces finge ser dolor el dolor que en verdad siente...

    Un abrazo a ambos y gracias por pasar.

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