viernes, 28 de octubre de 2011

Tres Tristes Tigres (Recital Novedades de Poesía Costarricense)



La Editorial de la UNED estará participando en la Feria Internacional del libro a realizarse del 12 al 20 de noviembre del 2011, en las instalaciones de la Antigua Aduana (Salón Victor Hugo). Para la EUNED será un honor contar con un grupo tan distinguido de escritores en el segmento NOVEDADES POESÍA COSTARRICENSE.


Día: Jueves, 17 de Noviembre
Hora: 6:00 p.m.
Actividad: Novedades Poesía Costarricense EUNED 2011.
Salón: Víctor Hugo
Organiza: EUNED


Con Gustavo Solorzano (Retrato de una generación imposible. Muestra de 10 poetas costarricenses y 21 años de su poesía)


Gustavo Adolfo Chaves (Vida ajena)


Juan Carlos Olivas (Bitácora de los hechos consumados).


Presenta: Gustavo Solorzano
EUNED


lunes, 22 de agosto de 2011

Presentación del poemario Bitácora de los hechos consumados

Presentación de mi segundo libro de poesía.


Día: Miércoles 28 de setiembre.


Hora: 7:00pm


Lugar: Instituto de México (Barrio "Los Yoses", 250 mts al sur de la Agencia SUBARU).


Presentan: Gustavo Solórzano-Alfaro y Luis Antonio Bedoya.


Entrada: Gratuita


Contaremos con intermedios dramáticos, música y el tradicional vinito.


Quedan todos cordialmente invitados.

domingo, 31 de julio de 2011

Ya salió Bitácora de los hechos consumados, mi segundo poemario!!!




Y bueno amigos, valió la espera y ya está publicado mi segundo poemario con la EUNED, quienes vienen haciendo un muy buen trabajo publicando obras de poesía y esta vez me tocó el turno a mi. Quiero agradecer por este medio a mi amigo y no por eso editor de esta obra mía Gustavo Solórzano-Alfaro, por su paciencia y acertados comentarios a este pobre poeta atribulado. Pronto estaré anunciando la(s) fecha(s) de la presentación(nes) de este nuevo libro. Por ahora, me esperan ciertas bebidas espirutuosas para brindar y celebrar, así que alzo mi copa y brindo! Salud!


Aquí lasmalasjuntas.com/2011/08/05/cuatro-poemas-2/ pueden leer cuatro poemas de este libro!

viernes, 1 de julio de 2011

ARRULLO FUNERARIO PARA EUNICE

Llegaré borracho a tu funeral Eunice,
aunque no haya alguno,
aunque el viento desarme las letras de tu tumba
hasta anegarlas en los jacintos de mis labios.

Llegaré a tu funeral, borracho,
y estaremos ahí,
diciéndonos tan sólo esas palabras
que los hombres olvidan cuando mueren,
cuando han sido vedados los caminos
y uno mira atrás, sin nombre,
o sin más nombre que el presagio
de algo que sabemos no vendrá.

Llegaré borracho
y te diré mi nombre aunque lo sepas
y diré soy la Nada,
ahí donde tus manos reposan,
y beberás conmigo los huesos de los hombres,
vendrás con la antigua presunción
de quien no muere,
de quien juega esgrima en el espejo
y siempre gana la partida.

Llegaré borracho Eunice
y me perdonarás,
tú que nunca conociste la embriaguez,
y llevaré el mirto de mis últimos días junto a tí,
para que duermas cálida, al fin,
tan sin mí, tan fugaz,
tan dulcemente.


(De Mientras arden las cumbres, 2011)

viernes, 10 de junio de 2011

MUNDO EN CALMA

All manner of thing shall be well

when the tongues of flame are in-folded

into the crowned knot of fire

and the fire and the rose are one.


T.S. Eliot

The Four Quartets




Aunque Eliot diga

que todo irá bien

y toda clase de cosas irá bien,

continúo atado al borde de una mesa

y batallo contra los elementos

que mi sombra domestica:

el pan ácido del mundo,

este corazón que va secándose

en cada cumpleaños

frente a televisores que dibujan

mis historias mínimas,

y que pueden ser la historia

de un joven en un café

escribiendo sus mentiras,

un despilfarro de fe para salvarse.


No tengo más que esta ciudad

que me rompe los labios,

y puede que todo vaya bien

según Eliot,

puede que el drama del hambre

no sea más que una excusa

para seguir reuniéndonos

y pasar el recuento -noche a noche-

de un holocausto personal

que a nadie importa,

puede que la tristeza no sea más que sequía

y nuestros ojos busquen

el pasto de un cuerpo inalcanzable,

y ya para entonces asistamos a la vida

con profesión, familia

y sonrisa insoportable;

dirían las abuelas que crecimos demasiado

y nos daría miedo marcharnos de repente

sin antes ver nuestro rostro reflejado en el agua.


Toda clase de cosas iría bien,

incluso aquello que dejamos incompleto:

no barrer tanta ceniza debajo de la lengua,

acomodar los libros, las mañanas, el cansancio

y dejar puertas abiertas como brazos.


Podríamos querernos de otra forma,

levantarnos temprano

y escuchar el llanto de la luz cuando amanece,

o sinceramente abofetearnos con el rocío,

la esperanza o la ignorancia

de quien no sabe que todo esto iría bien,

y toda clase de cosas iría bien,

si alguien nos hubiese dicho

que la vida era esto.



(Del libro Mientras arden las cumbres, 2011)

sábado, 30 de abril de 2011

Poema de Lédo Ivo (Brasil 1924-)

LAS PALABRAS DESTERRADAS



Los poetas son sepultureros que entierran palabras
y se contentan con las migajas del diccionario.
Criaturas frugales, no aceptan que las palabras brillen como luces de navíos
vistas desde la playa blanca de la página, desde la banal playa de la vida.
Exigen de ellas la sumisión de las bestias domadas en un circo
o que vayan vestidas con el hábito de los franciscanos.
Pero en la noche frígida barrida por las constelaciones
las palabras desterradas se levantan de sus tumbas
y, en el espacio reservado a las fulguraciones perpetuas,
componen el gran poema del universo.

jueves, 21 de abril de 2011

Abadía



Soy quien lleva la tea

y clama a sus cenizas,

el abad de los huesos de Rimbaud,

y el delirio frente al mar

en la isla de Patmos.

En mi se quema el río de la noche

y lo demás es sombra,

literatura y sombra

creciente en las ramas del olivo.


Alguien aulló y supo mi nombre,

de él bebieron antiguos esclavos

entre campos de algodón,

en él se predispuso el poniente

a enseñar su entraña vácua y delatora,

en él un día quebraron el altar

de los desesperados.


Benditas sean las péyades

y su afán de ruina siempre.

Un amigo me llama

a que cante el escombro

hacia mi nombre,
y yo no tengo más

que el firmamento mutilado

en mil otoños concebidos;

de mi mano yace un péndulo

de estricta eternidad,

los huesos de Rimbaud

afinan su belleza

como un cuchillo roto,

y más allá del muro

crece el fin.



(Inédito del libro Miedo a los sótanos, 2011)

jueves, 24 de marzo de 2011

EL DÍA DUDOSO


Y los niños vieron el rostro de Mallarmé
y le conocieron,
bajando por el hato de lágrimas.
Tomaron sus bicicletas
y fueron hasta el sur de una colina
amparados por el ángel del misterio.
Sus padres descreyeron aquel día,
lavaron a sus hijos en la piedra;
luego quemaron sus ojos
con la astilla de un espejo.
Dijeron:
La poesía no será sino esa copa concurrente
que fingirás llenar de lágrimas.
Mallarmé lo vio todo desde una nube,
alguien robó las bicicletas,
y en el valle hay muchos padres
que aún no pueden llorar.

martes, 15 de marzo de 2011

Recitales de Poesía en Turrialba en el marco del Festival Nacional de las Artes

Amigos, los invitamos para que nos acompañen a los distintos recitales de poesía que tendremos en Turrialba. Este es el programa actualizado de las actividades que tendremos:


1. Viernes 18 de Marzo: "Las Fronteras que nos Unen" (Poetas centroamericanos que residen en Costa Rica) Américo Ochoa (El Salvador), Dennis Ávila (Honduraras), Carlos Calero (Nicaragua), Marco Aguilar (Costa Rica).

2. Sábado 19 de Marzo: "Jóvenes Poetas Turrialbeños". Juan Carlos Olivas, Rolando Merayo, Armando Merayo. Micrófono abierto.

3. Domingo 20 de Marzo: "Voz de Mujer I" (Jóvenes Poetisas Costarricenses). Carolina Quintero, Paola Valverde, Carmen Quintero, Cristina Ramirez, Stephanie Sánchez. Micrófono abierto.

4. Lunes 21 de Marzo: Poetas Costarricenses. Esteban Ramírez, Bernardo Corrales, Mauricio Molina, Roberto Cartín. Micrófono abierto.

5. Martes 22 de Marzo: Poetas Costarricenses. Daniel Matul, Norberto Salinas, César Angulo. Micrófono abierto.

6. Miércoles 23 de Marzo: Poetas Costarricenses. Leonardo Villegas, Eugenio Redondo, Jonathan Lépiz, Henry López Padilla. Micrófono abierto.

7. Jueves 24 de Marzo: Poetas Costarricenses. Fransisco Mata, Joan Bernal, Carlos Salvatierra, Oscar Castro. Micrófono abierto.

8. Viernes 25 de Marzo: "Poesía Urbana". Alfredo Trejos, Ricardo Marín, Fransisco Gutiérrez. Micrófono abierto.

9. Sábado 26 de Marzo: "Círculo de Poetas Turrialbeños". Marco Aguilar, Laureano Albán, Carlos Salvatierra, Roberto Cartín. Micrófono abierto.

10. Domingo 27 de Marzo: "Voz de Mujer II". Julieta Dobles, Arabella Salaberri, Delia Mc Donald Woolery. Micrófono abierto.


LUGAR: Restaurante La Feria, 150 mts de la parada de autobuses, 7:00pm. Entrada gratuita.

sábado, 12 de marzo de 2011

Más de una razón para creer en lo imposible


Lo estoy llamando por teléfono cuando voy a quince metros de su casa. Es la costumbre. Él siempre lo intuye y se encuentra esperándome en el corredor. No hemos termindado de colgar el teléfono cuando nuestras miradas se entrecruzan y una sonrisa cómplice se asoma a nuestras caras. Lo que sigue es un abrazo. Al estrechar su cuerpo lo siento más flaco cada día; aún así, más grande diría yo, como esos pequeños dioses que crecen en la infancia y después se desvanecen.
La casa huele a humo de cigarro. El piso de madera se hunde a nuestro andar. La biblioteca está desordenada como siempre, ojeo los diferentes tomos de enciclopedias, San Juan de la Cruz, Ezra Pound y otros. La luz se proyecta a travez de la ventana y Rolando enciende un cigarrillo. Le pido que me lea algo nuevo. Quiero poesía, verdadera poesía.
Hay papeles desordenados en la cama y me dice: Esto es de un nuevo libro que estoy preparando. Le pregunto cúal es su título y me responde: Razones de lo Imposible. Procede a leer. Siempre me ha parecido que lee pésimo, es como un gato agonizante, aún así quedo totalmente extasiado por el poema, es simplemente hermoso. Posee la locura de la iluminación y la belleza de un pájaro destruído por la poesía. Le insisto en publicarlo. Rolando es un ser demasiado terco, aunque lo entiendo. Nuestro país está culturalmente regido por mediocres y él no quiere ser víctima de este fastuoso sistema. Es una lástima.
Tomamos café y mate. Salimos a los tubos y fumamos mientras miramos a las mujeres de Turrialba pasar como una ráfaga de niebla en el recuerdo. Me despido. Otro abrazo, y retorno a la vida real, a la espantosa vida real.
Han pasado tres meses y no tengo noticias de mi amigo. Me pregunto por esa razón de lo imposible que es el acto poético, esa fe insana de los que permanecemos despiertos.
Me ha llamado Rolando. Lo noto con ira y deprimido a la vez. La Editorial Costa Rica ha rechazado su libro de poesía. La ira nos consume a ambos desde las piernas a los labios que ahora profieren vastos improperios contra tal institución. Ni siquiera tuvieron la descencia de escribir una carta justificando su negativa hacia el libro. Pero nada, no queda otro camino que seguir intentándolo, poner la otra mejilla ente el bastardo y proseguir en el camino de los cardos que se anegan a los pies.
Volvieron a pasar algunos meses. Rolando está eufórico. Me dice que Razones de lo Imposible ha ganado un premio en España. A mi no me asombró en lo absoluto; más bien me pareció algo predecible, algo seguro que por alguna extraña razón no se había dado antes. Lo felicito y me apena no estar en Turrialba en ese momento. Pienso en la Editorial Costa Rica. Deben de estar jalándose los pelos.
Voy para mi trabajo. A pesar de mi mismo son las seis de la mañana. No sé cómo puedo tolerar tanta realidad. Tampoco sé cómo alguien tiene la osadía de llamarme a esas horas de la madrugada. Pero maldita sea, es Rolando. Me dice que ya tiene los libros en sus manos. Le digo que iré a visitarlo ese mismo día en la tarde y así lo hago. Cuando llego me está esperando como siempre. Es imposible no ver la luz sobre su rostro. Me da mi ejemplar y lo siento como un sobrino al que siempre he amado. Nos despedimos. Tomo el bus de Turrialba a Cartago y durante el trayecto, es decir, en hora y veinte minutos he terminado de leer lo que duró más de un año de arduo sufrimiento por parte de mi amigo y por parte de los que esperábamos con ansias este libro.
Al momento que escribo estas líneas usted lector, pensará que hablaré del libro en detalles, pero no. No me da la gana hacerlo porque no soy un crítico (eso se lo dejo a la Editorial Costa Rica) sino un lector terminal, que padece de poesía; he de decir, eso sí, que he leído hasta el momento alrededor de diez veces el libro de Rolando y que no me canso de leerlo. Eso justifica estas líneas y esa es la razón de un sueño imposible que en el tiempo presente es la única realidad que existe.


Juan Carlos Olivas,
San José, 12 de Marzo 2011.

martes, 1 de marzo de 2011

Recital de Poesía

Este próximo sábado 5 de marzo en el Parque España, San José, a las 5:30pm, se estará celebrando un recital de poesía que contará con la participación de los poetas Byron Espinosa, Juan Carlos Olivas, Carmen Quintero y David Cruz, entre otros...
Esta casa invita cordialmente a todos los que quieran llegar y compartir la palabra poética.
En el lugar habrá venta de libros de algunos de los autores que se presentarán en esta cita, así como la participación de Ediciones Espiral.

Se les quiere y nos vemos en el Parque España!

lunes, 24 de enero de 2011

ELEGÍA DEL POETA QUE VUELVE


Yo adivino el parpadeo
de las luces que a lo lejos
van marcando mi retorno.
Carlos Gardel



Lo primero que haré
será besar la tierra
como el suicida besa
la paciencia de la soga
y los ríos besan en tiempos despeñados
sus fábulas de abismo.

Devolveré la piedra
que guardé en la mochila
y llegaré al volcán Turrialba
más herido de versos que de niebla,
y me sentaré a esperar
las nubes que no pasan,
y los sueños que no pasan,
y los años soberbios que no pasan.
Y cuando todo quede
rendido de presagios
veré a mi madre en el fuego de la acacia,
y a mi hijo sembrar los prados nuevos,
y la piedra que estuvo amordazada
recordará la joven boca de la ausencia,
los campos ungidos de ceniza,
la mandrágora que imita
el sueño del arcángel
y todo cuanto pudo ser
del anhelo de la mansedumbre.

Porque todo final
es asesino de auroras en mis manos
y mis ojos vigilan
el estruendo del amanecer
como un pórtico que abre el comienzo.

Es ahí donde los hombres
roban la fragancia que no les fue devuelta,
es ahí donde las jóvenes
se marchitan en los parques
esperando la vida.
Esto y mucho más
he visto rodar del tiempo ególatra,
enseño mis ecos a los muros de la ciudad
y los caminos son la armonía
del paso en la mirada.

Hoy me colman pensamientos de volver
y la música regresa devastada en los teléfonos;
he olvidado la canción del reposo,
mi barro me entristece en demasía
y parece que del cielo
está cayendo agua del mar,
más sé que es verano
en este atlántico sin puertos.

El espejo me viste a su medida
más esa imagen sólo existe en el cristal,
no va conmigo
cuando todos me ofrecen su silencio,
no me acompaña cuando ofrendo mi vida
debajo de los puentes,
ni cuando escribo poemas
como flores carnívoras
que devorasen por igual, moscas
y versos de Góngora preescritos
para alguna mujer que no lo merecía.

Porque así es la vida,
no basta con acariciar
toda la mitología grecoromana,
ni siquiera sentirse desdichado
bajo las ruinas de Cartago,
ni en las soledades de una Turrialba umbría
que me aguza el recuerdo.

Todo se trata quizá
de sentirse un poco trágico,
buscar falsos personajes
que merezcan elegías,
entre cielos y yámbicos,
y no encontrar a nadie más
salvo a uno mismo.

martes, 11 de enero de 2011

Poema de Rafael Rubio (Santiago de Chile, 1975)

BUCOLICA



La luz es pájaro y el cielo tiene hambre.
Ah ojo de bronce el sol, un ojo hambriento que come
una luz que es oscura
cuando el cielo se cierne sobre el aire
y el labriego finalmente capitula
ante la inutilidad del sembradío.
El veneno del sol sobre los pastos.
Los animales malos que nos lamen
a la hora en que adentro de la luz se desata la ira del caballo
y las hierbas se estremecen como madres
cuando las roza el látigo del sol
a la hora en que la luz es una herida
y sólo queda en el aire lo que del aire queda cuando pasa
una llaga de pájaro en los cielos
porque en este valle rojo ¡Oh padre! donde
las vacas mugen sin consuelo
porque han perdido sus manchas para siempre
en esos mismos cerros en los que te crucificaron
para escarnio de las bestias que pastaban ahí
bajo la vigilancia del sol en este valle rojo
donde el nombre de Dios es una herida
que los pájaros lamen y beben
una llaga de amor sobre los pastos
una raja en el cielo por donde pasa el cielo
traspasado por los aires que el viento zarandea
lo que del aire queda cuando pasa
una llaga de pájaro en los valles
oiremos el zumbido de la luz.
Benditos sean los ciegos.
Benditos sean los sordos, porque ellos
oirán el estruendo del sol cuando amanezca.


(Del libro Luz Rabiosa, 2007)

domingo, 2 de enero de 2011

Ha muerto el poeta Fransisco Ruiz Udiel (Estelí, Nicaragua, 1977-2011)


Nos ha llegado esta noticia de la muerte de este joven poeta y sinceramente nos duele. A Fransisco lo recuerdo porque lo conocí en Costa Rica, durante el festival internacional de poesía. Compartió con nosotros en Turrialba alrededor de una semana en la cual se mezclaron poesía, bares, y hermosas tertulias que yo por mi parte nunca olvidaré; en especial algo que me dijo mientras viajábamos en el bus de Turrialba a San José, ya al final del festival. Se trataba de algo que Gastón Bachelard menciona en uno de sus libros: el tiempo horizontal y el tiempo vertical. El tiempo horizontal (regido por la razón) parece ser el camino que la mayoría de las personas decide tomar, mientras que por su parte, el tiempo vertical (regido por la pasión), es un camino muy difícil de tomar debido a que ambos tiempos no concuerdan o por lo menos es muy difícil llevar un tiempo horizontal y vertical a la vez. No existen términos medios. Lo que debemos hacer no es siempre lo que deseamos hacer. Fransisco lo sabía. Es por esa misma razón que este poeta trataba de crear tiempos verticales, escribió poemas en papeles sin firmar y los dejó en el asiento vacío de un autobús para que algún desconocido los leyera o se mofara de ellos; por eso hizo grafittis con amigos que se sentían tristes y por eso susurró versos al oído de su novia mientras cocinaba la cena. Nunca pude imaginarme a Fransisco viviendo en un tiempo horizontal, creo que él tampoco, y ahora su prematura muerte es precisamente la confirmación de aquella conversación que entablamos en el bus en mayo del 2009. Hay cosas que simplemente se nos escapan de las manos y solamente podemos llorarlas en los sueños.
Juan Carlos Olivas,
Cartago, Costa Rica.